Con cifras muy similares, tanto los sectores de logística como de oficinas mantienen un poco más de 200.000 m2 en construcción.

A pesar de esto, la diferencia principal entre estos dos sectores radica en sus perspectivas futuras y demandas específicas. El sector logístico presenta más volatilidad y la creciente necesidad de espacios amplios y bien ubicados y se enfrenta al desafío constante de adaptarse a nuevas tecnologías y patrones de consumo, lo que impulsa la demanda por grandes áreas de almacenamiento y distribución estratégicamente ubicadas.

Por otro lado, el sector corporativo de oficinas está intrínsecamente ligado a las tendencias de demanda de las empresas y las evoluciones en las modalidades de trabajo.