La asesoría inmobiliaria ha debido enfrentar tiempos difíciles, desde políticos, económicos y hasta de seguridad sanitaria; sin embargo, ha tenido la oportunidad de flexibilizarse en ciertas áreas, adaptarse a la situación, enfrentarse a nuevos retos con las transformaciones del mercado y especializarse en ciertos sectores. En especial, la pandemia ha obligado a hacer sinergias o trabajo colaborativo entre brókers de otros mercados para poder salir adelante, pero sin perder la ética y el compromiso, buscando el apoyo entre todos y abrirse a nuevas estrategias.
“Estamos haciendo equipos con personas que no se dedican al mercado, pero haciendo esfuerzos para que los espacios se ocupen y apoyándonos entre todos, ayudando a las empresas en la ocupación y apoyando a los desarrolladores que ahora se involucran en los procesos. En la actualidad, se ha tenido que promover la flexibilidad, fortalecer la confianza y valorar la labor de los brókers”, Lidia Degetau, Associate Director.
Los cierres de una operación dependen, en gran medida, de la habilidad del bróker para acercar a la persona que tiene la solución con la que tiene una necesidad, por lo que la confianza es un elemento clave entre las partes. También hay procesos a la medida: desde clientes que necesitan acompañamiento desde un principio hasta el cierre de la operación; hasta otros que solo buscan una asesoría particular.
El cliente debe estar al tanto del mercado para realizar una operación -idealmente seis meses antes-, ya que se lleva un proceso de búsqueda, ubicación, zonificación, cumplimiento de requisitos, entre otros. Por ello, es importante tener disposición para una negociación -que puede llevar hasta 60 meses-.
Una de las características que debe tener un bróker en estos tiempos es las ganas de trabajar y dar resultados. De igual forma, es fundamental demostrar responsabilidad y compromiso, así como tener capacidad de relación con los tomadores de decisiones y ofrecerles soluciones precisas. En especial en contexto actual, deben estar atentos a los cambios y convertirse en el brazo derecho en real estate de los clientes. Adicionalmente, hay que reconocer cómo la tecnología se ha vuelto una herramienta imprescindible en la actividad actual de los brókers.
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